Ordnajelá
Volviste a tus inicios
de la tierra
embarrada
donde flotabas
para esquivar su
saña.
El aroma de ellos
repugnaba
borrando tu
olfato
para no decirle
que no la amabas,
apoyándote en los
dos puntos, solo, descansabas
soñando con el
mundo de preceptos que marcaban.
No podías estar
lejos de tu causa
caminaste por el sendero
rojo con tu cara marginada
cuando el campo
de fresias era tu morada
permitiendo que
tus sentidos te duraran
aunque eso no
alcanzara.
La hombría destruida
del hombre corría
cada vez que
intentaba demostrarse que existía.,
como un fantasma
que desea volver a la vida
los juegos maquiavélicos
lo destruían
dejándolo como tempano
de hielo
perdiendo su línea.
Fénix
No hay comentarios:
Publicar un comentario