Me entrego
Con mi cabello ajado,
mis ojos nublados
y mi alma
durmiente
me entrego a ti
señora.
Sin amor en mi
camino
sin estrellas ni
destino
como peregrino en
picada,
me entrego hoy a
tus manos.
Con mi alma
solitaria
con hielo sin
templanza,
con valor!!!
a ti me entrego
señora.
No existen
miradas
ni caricias y
menos carcajadas
es el fin de la
sonrisa,
a ti señora te
entrego mi vida.
Mi respeto ruega
que tu prisa no
demore
como aquel día
que pasaste
por mi lado, avisándome
señora.
Fénix